Tras una noche de rayos y truenos... pero truenos de los que muchos de vosotros nunca habréis oído, nos levantamos sin saber si el barco zarparía para Phi Phi. Los tailandeses no son capaces de explicar nada o decirte que pasa. Así que una vez más como verdaderos tonturistas nos metieron en un cayuco lloviendo a cantaros y nos dejaron ahí más de 30 minutos, empapándonos por la lluvia y porque se inundaba poco a poco hasta el momento en que tuvieron que desalojar la mitad del barco. Por fin vimos llegar el Ferry a lo lejos y casi remando con los pies porque entraba muchísima agua fuimos hasta el ferry. Allí nos juntamos con unos catalanes super majos con los que decidimos compartir nuestras experiencias en Phi Phi.
Una vez en Phi Phi nos pasearon dos thai por todas las calles en busca de alojamiento y al final conseguimos unos bungalow chulísimos de bambú pegados a la playa “very nice” y una vez pagados nos comenta la dueña... “¡Por cierto... lo que veis delante vuestra es un bar de marcha “El Apache” y tienen la música a toda ostia hasta las dos de la madrugada, jejeje!” Será la tía... nos lo dice después de pagar, vaya cara!! pero bueno sino puedes con el enemigo únete a él, así que de marcha hasta a la 2.
Este sitio hace unos años era un paraíso, ahora también pero es occidental, comida inglesa, tiendas de ropa y muy turístico, aun así nos está encantando. Por la tarde decidimos patear la isla, fuimos a LONG BEACH, una playa al otro lado de la isla, aunque por el camino nos cruzamos con una plaga de unos bichos voladores y piedras asesinas que resbalaban como dios!!! Pero salimos ilesos, uff!De ahí nos fuimos al VIEWPOINT en lo más alto de la montaña para ver el atardecer, aunque con un poco de lluvia y con las nubes, pudimos ver poco, aunque impresionante!! por la noche espectáculo de fuego en la playa y hasta el día siguiente.
vaya vaya que estrés (el mío)tantos días sin ver los capítulos diarios de mis aventuras favoritas y nos metéis tres de golpe y sopetón. Esto no puede ser y además cuando se meten todas juntas ya no salen en orden. Es un disfrute comprobar lo mal que lo estáis pasando, los mosquitos, la selva indómita, los peligros de la montaña, las pirañas (no le deis de comer a los peces que se acostumbran y luego van a por vosotros), los catalanes y su barça, las playas con su peligroso sol, en fin cuidaros mucho y un abrazo enorme de un envidioso. Vio pa tí millones de besos de todos nosotros, si te enteras de vuelos baratos pallá nos lo dices inmediatamente. besos
ResponderEliminarHOLA
ResponderEliminarbueno chicos despues de varios dias habeis mandao un porron de historias y fotos ya estoy aprendiendo a poner comentarios tu madre esta contenta porque habeis vendido las cuerdasya sabeis no perderos por la selva un besito papi
ResponderEliminar